lundi, janvier 24, 2011

Vint i quatro de jannuario de MCCXXV: "Crónica larga de un fin de semana más largo aún"

Después de todo un año oyendo hablar grandiosidades al respecto... ya he sobrevivido a mi primer día de San Sebastián por estas tierras. Y he de decir que mola, aunque dentro de lo que cabe hicimos una juerga bastante moderada. La conclusión generada al respecto de todo el evento es la siguiente: los robasetas están como cabras. Además de que están entrenados desde su más tierna infancia para invadir Polonia. Echaos a temblar si les da por invadir Polonia o por invadir, en general, porque están organizadísimos (de hecho, "todo está organizado" fue la frase del finde).

Como pasa si
empre en estas cosas, el que lo ha vivido desde niño echa la lagrimita y se emociona, como hago yo el seis de julio en Pamplona... pero, aunque no nos emocionemos como hacen los giputxis, he de decir que me lo pasé muy bien, que la verdad es que es muy chulo, pero mucho, ver cómo sacuden el tambor y cómo lo tienen montado. Es una gozada ver cómo van vestidos y cómo la gente se planta ahí con su tambor con intenciones de montar ruido aunque no estén en ninguna compañía. Eso sí, como siempre hay que dejar alguna queja... la mía es que estos giputxis no me dieron el pack tamborrada ni me enseñaron las coreografías ni las canciones antes del fiestón (aunque Marta me echó una mano dejándome tocar su tambor con una clase improvisada sobre la marcha, jaja). Claro, luego pasa lo que pasa, que está una haciendo el pata y los del fondo de la plaza saben que es "la de fuera" por saltar cuando no tocaba. Mal, muy mal. Para el año que viene exijo entrenamiento previo y mi pack tamborrada con un tambor para aporrear. Y miedo me da seguir quejándome porque a Yazston ya se le iluminó la idea de llevarme el año que viene vestida de cantinera, para educarme al respecto desde el principio (parece que las niñas pequeñas van vestidas de cantinera, antes de que les dejen tocar tambores ni cosas del estilo), para que haga el tonto saludando con la mano. Así que no insistiré mucho más... Pero quiero mi pack.

Foto de grupillo que nos sacó Fiondil... que se vino de visita relámpago y se volvió a Bilbao después de la tamborrada... ¡y eso que le ofrecimos asilo político en el pumpuño!

Por otra parte, el viernes tenía puente en el curro y, ya que me habían amenazado mis antiguos jefes del Samsara con retirarme la palabra si no me presentaba en no recuerdo qué plazo... pues me fui con Yazston a Barc
elona el viernes por la tarde haciendo una obligada paradita en Zaragoza en la que pudimos tomar un cafecito con Maya y Clara en primer lugar y con Lameri, Tuor y compañía en segundo... una gozada poder veros y una pena no poder ver a toda la gente que echo de menos de por ahí. La próxima vez a ver si hago finde en Zaragoza y así puedo veros a los que llevo sin veros desde antes de irme a Barcelona... al abuelito, a Danny y Myrian y a Paula y Alberto, sobre todo, que sus echo de menos mil o más. De sobra sabéis que tenéis casa en Donosti para cuando saquéis un finde libre.

En Barcelona pretendía pegar un toque a Eöl, que no lo veo desde que estuvo Bardo de visita en verano, pero me pasó lo habitual... me levanté a las mil y medio en coma, así que, tras jugar un rato al Heroes y marujear con Ortzi, quedamos para comer con Rober en un wok que resulto no ser nada del otro jueves... y por la tarde ya habíamos quedado con Gato y con la Gata, con los que nos echamos unos cafecillos y unas risas. Luego resultó que Bardo también ha debido de andar por Barcelona, pero como ha sido tan discreto con su escapada como nosotros... pues nos enteramos cuando nos estábamos poniendo de camino a Donosti. Ainsfl... mira que podíamos haber ido juntos y haberte devuelto la camiseta que aún tengo tuya, Bardet.

La noche del sábado teníamos el plato fuerte del finde, que fue la cena en el Samsara. Convocamos a gentuza como Marc y Héctor, que vinieron bien acompañados y con Ortzi, que no podía faltar, como habitual del garito. Inte
ntamos convocar también a Chuzo y, cuando dio señales de vida, se plantó por ahí... no para cenar, pero sí para echar unas copas. La cena fue tan genial como siempre... nos pusimos hasta arriba de zampar los platos habituales (no pueden faltar el tartar de atún, las neulas o las bravas de boniato) y también dimos buena cuenta de las novedades de la carta: las croquetas de boletus que ya había catado antes de irme, un timbal de bacalao buenísimo y también se pidió un cordero que debía de estar de miedo, porque no duró nada en la mesa. Todo esto lo regamos con el habitual Martín Códax (somos gente de costumbres) y luego nos zampamos los postres de siempre (cualquiera osa ir con estos y no pedir los buñuelos y el coulant de chocolate... aunque también cayeron un brownie y una tarta tatin). Una gozada. Para todo el que no haya estado nunca... está en la calle Terol y debe de ser una de las mejores opciones de cena que hay en Barcelona.

Una vez cenados, tuvimos que dar cuenta de la nueva carta de cócteles y cubatas, donde los fans del gin-tonic se pusieron locos con la ampliación de la carta de ginebras.

Ginebras y cócteles en el Samsara, después de cenar

A la buena mesa se suma el personal que trabaja por ahí. Una gozada poder saludar a Roser y a Pedro, que son amor los dos y cocinan como no se ha visto. Siguen tan guapos y tan majos como siempre. Además, coincidió que trabajaban los dos camareros más majos que andan por ahí, que son Christian y Natalia. Una gozada también poder marujear un rato con ellos y echarnos unas risas.

Foto de grupo en el Merlín

Salimos, como viene siendo habitual, cuando ya cerraban el sitio (aunque intentamos contribuir recogiendo algún banco, jajaja)... dado el estado en el que nos encontrábamos, unos cuantos continuamos la juerga por Marina, pena que ya estaba cerrado el Cefe y tuvimos que ir directamente a un antro llamado Merlín. Un desastre, pero bueno... tal y como íbamos, tampoco creáis que nos importó. Como podéis apreciar, estábamos bastante animados.

Rober y Marc poseídos por el espíritu del Metal. Es muy posible que estuvieran poniendo de música Shakira o Bisbal o a saber qué... pero se les ve convencidos

Y dicho esto, retírome, que ya tenéis parrafada para días. R
ecomiendo tomar un buen té rojo acompañado de buena música... en este caso de "Hallowed be thy name" de Maiden, que nos salió en el coche de vuelta... y moló.

samedi, janvier 15, 2011

Quinçe de jannuario de MCCXXV: Diferentes opciones de frikismo

La parte buena de vivir en Alza es que es un barrio bonito, tranquilo, con unas vistas estupendas y unos pisos nuevos con precios bastante más razonables que en pleno centro de Donosti. La parte mala es que, cuando trabajas en el centro, tienes horario partido y no conduces, te tienes que tragar un número importante de viajes mensuales en autobús. Como suele decirse, todo tiene lado bueno en esta vida y a mí me está sirviendo para recuperar mi afición autobusera al manga. Y es que, sin lugar a dudas, un manga es mucho más ligero y cómodo para llevar encima y requiere menos concentración que un libro (todo son ventajas).

Entre idas y venidas por fin me he pulido, Kyo, q
ue me lo pasó Yazston hace la tira de tiempo (debe de hacer casi un año o así...) y al todavía no le había hincado el diente. La verdad es que, aunque no será de lo mejor que haya caído en mis manos, creo que es bastante recomendable. ¿Razones? Una historia entretenida, personajes muy buenos (algunos muy destacables, como Hotaru, Sasuke o el gran Yukimura Sanada), buenos ratos de humor, alguno de epicismo y un dibujo que, si al principio parecía bonito sin más, va mejorando conforme avanza la historia y en los últimos tomos hay viñetas que son una auténtica gozada de ver. En contra, sin embargo, he de decir que la historia a veces entra "en bucle" con el clásico recurso mangaka de enfrentar uno a uno a todos los personajes que molan con el problema añadido de que "los buenos nunca mueren". De hecho, ni siquiera los malos molones lo hacen, puesto que luego resultan no ser tan malos. Tanta tralla, tanta sangre, tanto "tiene todos los huesos y los músculos destrozados, no podrá volver a moverse" y total, que luego nadie muere y siempre pueden volver a repartir más metal. El problema de eso es que quita epicismo... las batallas pierden interés cuando sabes cómo van a terminar. A mi modo de ver... le sobra relleno y le faltan muertes dramáticas. Por lo demás... está muy bien y la verdad es que lo he disfrutado bastante. Si tenéis oportunidad de echarle el guante, es una buena opción.

Impresionante el dibujo, sobre todo conforme avanza la historia. Una gozada

Terminado Kyo y aún tenie
ndo pendiente desde los mismos tiempos Hellsing, he decidido retomar Naruto, que lo dejé colgado en espera de que me suministraran más tomos, jajaja. El caso es que, entre el anime y el manga... no tengo ni idea de dónde me había quedado, así que directamente he empezado otra vez desde el principio, que merece igualmente la pena. Eso sí, el contraste entre el dibujo de Kyo y el de Naruto es muy duro. Apufff está todo como acumulado y chungo. Creo que la otra vez pensé lo mismo pero bueno, se me pasó pronto. Y hombre, reencontrarse con Naruto, Kakashi y compañía siempre es una opción apetitosa. Más aún cuando el frikazo éste con el que convivo ya se ha hecho con todos los tomos publicados y estos reposan plácidamente en la estantería del salón (siempre es un plus).

Volviendo a Konoha y a sus habitantes

Pero no sólo de manga vive el friki y, aunque no me canse de decir que no soy friki, sino aficionada al género... una tiene sus necesidades. Tristemente hace unos meses que dejé abandonado Full Metal Alchemist Brotherhoood y ya he vuelto a la carga. Digo tristemente porque me quedaba bien poco para acabar la serie y me e
staba gustando tanto o más que la anterior, pero bueno... me puse manos a la obra hace unos días que estuve pochilla y a ver si en un ratillo ya hoy la finiquito (estoy descargando lo último que me faltaba). Como ya comenté por feisbúc, tengo la santa intención de hacerme con el manga también, pero como estoy en economía de contención forzosa y tengo material intacto en casa para toda una vida (o buena parte de ella, al menos)... la compra de productos de vicio va a tener que esperar unos meses, jajaja (pero volverá, no lo dudemos). En cualquier caso... dejo claro que la serie de Brotherhood es tan buena o más que la anterior, así que vuelvo a recomendar a todo el mundo hacerse con ella.

Terminada ya la serie, toca reconocer que he llegado incluso a echar la lagrimita... snif! A ver a qué ataco ahora...

Por último (y sí, desde luego, no menos importante), ¡he retomado el rol! Como Nuria y Raziel se han escapado a Dublín, la partida de Elric en
la que estaban jugando se había quedado un poco vacía, así que David y compañía me han hecho un huequecillo para que pueda unirme al grupete. Yo encantadísima, faltaría más. Es todo un lujazo jugar con esta gente, aunque hacía la tira de años que no jugaba a Elric y recordaba mucho menos de lo que creía.

Rol al más puro estilo de la vieja escuela...

Puesto que esta semana que viene no voy a poder jugar, tengo dos semanas por delante para darle duro al libro y tener más claro el personaje que quiero tener (además del sistema de juego, aunque estos perretes han hecho varios cambios).
Ayer fue mi primera partida y tengo que decir que hace ¡años! que no jugaba una partida de estas que duran toda una noche y aunque en Barcelona fue una gozada que me hicieran un hueco en la partida de Séptimo Mar... que fuera entre semana y tener todos unos horarios apretadillos hizo que fueran un poco cortitas y que siempre nos quedáramos con ganas de más... (y eso que, insisto, fue una gozada jugar con Joan, Marc y esta gente... pena me dio dejar aquella partida). La verdad es que me lo pasé genial con la panda de cafres compuesta por Edu, Ion y Asier, mientras David se llevaba las manos a la cabeza y Héctor (que también era su primer día) y yo flipábamos lo nuestro. Sobre el personaje que he elegido... aún es todo muy provisional, en espera de que me lea el libro y me haga una historieta en condiciones. En cualquier caso, es una sacerdotisa y, aunque pretendía que fuera dulce e inocente, no me dejaron opción y me presionaron a que me cogiera una guarra. Qué le vamos a hacer. Eso sí, tengo la impresión de estar encasillándome en el personaje de sacerdotisa guarrona.

Dicho esto, como veo que se me ha terminado de bajar el material, me despido recomendando un buen té negro especiado que debe acompañarse de "Cassandra", de Theatre of Tragedy.

mardi, janvier 11, 2011

Onçe de Jannuario de MCCXXV: "Malos Humos"

El otro día salí de farra por primera vez desde que pusieron la ley del tabaco. Ni siquiera tenía en cuenta que estaba ya en marcha hasta que entramos en el primer bar y lo vimos sin humo. Impresionante, oigan. Volver a casa sin olor a rayos en la ropa, con el pelo oliendo a champú y sin picor en los ojos no tiene precio. El día 2 de enero me levanté de la cama por última vez con una conjuntivitis de mil pares después de una noche de fiesta. Adiós malos olores, garganta reventada y ojos con la córnea granate. Cuando me vienen a echar pestes sobre la ley del tabaco sólo tengo una respuesta "perdona, pero yo no soy imparcial (y tú tampoco, por cierto): a mí me han hecho un favor".

Admito que, como nunca he fumado, no conozco la tremenda necesidad que tiene buena parte del país de fumar en cualquier momento, así que no entiendo el terrible agravio que aseguran que esto supone para ellos pero... no creo que cueste tanto salir fuera a fumar, qué quieren que les diga. No se les está prohibiendo que fumen, sino que lo hagan en lugares cerrados, imposibles de ventilar por mucho extractor de humos que haya y donde molesta a buena parte de la gente que está dentro.

Es más, muy poca de la gente con la que salgo habitualmente fuma, pero supongo que tarde o temprano saldré con unos y otros a la puerta del bar a acompañarles a fumar. Y por mí perfecto, no le veo el problema. De hecho, no entiendo por qué a ellos mismos no les parece bien entrar en lugares sin tabaco. La mayoría de los fumadores que conozco no lo hacen en el lugar donde duermen porque no les gusta dormir con todo el humo ahí ni que todo les apeste a tabaco. Muchos han terminado por admitir que es más agradable trabajar en un lugar sin humo, pese a que pusieron el grito en el cielo cuando se les prohibió fumar en sus lugares de trabajo. Como suele suceder en estos casos, terminarán por acostumbrarse y punto. El otro día me comentaba una fumadora que a ella le ha molestado bien poco, porque le gusta más estar fuera que dentro de los bares, y así se asegura de que el personal saldrá fuera con ella, así que encantada.

Se habla de privación de derechos y de imposición, por parte del Gobierno, de la forma en que debemos vivir. No se plantean que, hasta el momento, se nos privaba a todos del derecho a poder salir y no sufrir las consecuencias de estar en lugares llenos de humo. A mí, personalmente, me molesta bastante, pero conozco a gente que directamente había dejado de salir porque le molestaba siete veces más. No se habla de que la gente que trabaja en hostelería está expuesta a la molestia que eso supone durante su jornada de trabajo (si tú te alegras de que tu lugar de trabajo esté libre de humos... por qué te vas a fumar al del vecino).

Se dice que debería haber opciones para fumadores. Y las hay, no crean, las sociedades sin ánimo de lucro que han decidido que dentro se puede fumar. Si todos los bares tienen opción a abrir para fumadores, es de esperar que todos sean para fumadores (salvo muy pocos), recordemos que esta situación se daba hasta la fecha y yo conozco exactamente un bar que era para no fumadores: el de la estación de Renfe y autobuses de Huesca. Del resto, aunque a muchos les gustaría, no les resultaba rentable abrir sólo para fumadores.

Se habla, también, del desastre que va a suponer para el sector hostelero y no me cabe la menor duda de que al principio puede que así sea, aunque no me creo las cifras tremendistas que se dan por ahí. También es cierto que empieza a haber más gente que antes no entraba por saturación de humos (y conozco a unos cuantos que están contentos de entrar en sitios donde antes no entraban). Por lo demás... no me cabe la menor duda de que la gente que ahora no sale por la prohibición de fumar, tarde o temprano saldrá y se les pasará el rebote. Alguno habrá que se quede en casa, pero serán minoría.

Lo que me toca las narices de toda esta historia es que no nos podemos alegrar de que hayan puesto la ley porque resulta que los fumadores están fastidiados, como si fuera culpa nuestra o algo. De verdad que la ley no la he puesto yo, en serio. A mí me han hecho un favor, pero el Gobierno no me ha consultado a ver si me parecía bien. Es más, dudo mucho que tenga algo que opinar el Gobierno en todo esto, considerando que toda Europa va por el mismo camino y ya se sabe que no está bien visto que un país se salga del tiesto.

Añadiré que, por supuesto y como es habitual, puede contestar quien le dé la gana y lo que le salga del pie, aunque no tengo intención de meterme en una discusión enzarzada al respecto. Ya he tenido bastantes en los últimos meses y a la única conclusión que he llegado es a la de que no voy a hacer cambiar de idea a nadie y nadie me la hace cambiar a mí. Ni siquiera cambiamos mucho de argumentos unos y otros, así que...

Recomendando... un lapsang souchong como el que me han traído los Reyes Majos... (más majoooos) y un poco de Symphony X, que los tenía medio abandonados y me acordé de ellos de golpe el otro día...

mercredi, janvier 05, 2011

Cinco de jannuario de MCCXV: "Año Huevo"

Pues hala, finiquitado el 2010, año que tan mal ha resultado para mucha de la gente que me rodea, que buena gana tenían ya de que terminara. Aunque no creo en el karma, sólo espero que en 2011 puedan compensar con creces los malos momentos de este año. Por lo que a mí respecta, ha sido un año que ha tenido bastante de todo. Lo bueno es que he tenido la suerte de tener buen apoyo en las cosas malas... y que ha habido unas cuantas muy buenas. En resumen... pues como casi todos los años, ha habido un poco de todo y más vale quedarse con lo bueno, que además es lo que más importa.

Por lo demás, como todo el mundo que me conoce supondrá, despedimos el año (o inauguramos el nuevo, mejor dicho) como está mandado... una buena juerga por Pamplona como hay pocas. Y es que no me canso de repetir que m
e encantan los Sanfermines, pero que Nochevieja es mucho mejor. Posiblemente porque es sólo una noche y la gente sale "a muerte", pero de verdad que a quien tenga oportunidad le recomiendo que pase una Nochevieja por tierras pamplonicas porque es apoteósico. Ahí lo de disfrazarse es religión, mucho más que en los Carnavales que he visto hasta la fecha. A eso se suma que, para los que no vivimos habitualmente en Pamplona, es una noche en la que casi seguro vamos a coincidir con todo el mundo que ha venido de fuera a pasar la noche. Añádase que, después de la cena familiar, el vino y el champán, uno sale más contento que unas castañuelas.

Empezando la noche. Más contentas que unas castañuelas, como se puede apreciar. Y eso que aún no habíamos bebido kalimotxo con alucinógenos...

Además, este año no hizo el frío que hemos tenido otros y hemos tenido la suerte de poder tomar algún que otro trago en la calle antes de entrar en los bares. Y merece la pena, sobre todo por contemplar el percal, que menudos trajes llevaba la gente este año. A destacar: sin lugar a dudas el
Tron que entró en el Atxiki, tan impresionante que, cuando lo vi, dije "me tengo que sacar una foto con ese tipo ya mismo", total, que al acercarme resultó que encima lo conocía. Aparte me encantó la cuadrilla que iban de Naruto. Naruto y Sasuke molaban, pero lo de Kiba (que llevaba hasta colmillitos), Hinata y Shino fue espectacular. Vaya grandes. Fue muy buena también la pastorcita de Toy Story aunque, como dijo Diego, verla con una botella de vodka en la mano destrozaba todos los valores de la infancia, jajajaja. En el apartado no friki, los más grandes fueron una cuadrilla que iban disfrazados de flamencos rosas (de flamenco bicho, no flamenco, señor de Flandes ni de la Andalucía profunda). No sólo iban impresionantes sino que encima los vimos haciendo poses. Brutal.

Resultó que conocía a Tron. Quién me lo iba a decir

A nosotros en cambio no nos quedó otra que asumir que no teníamos ni tiempo ni ganas para hacernos los trajes de romanos que teníamos planificados. Entre otras cosas, porque eso, o se hace bien y con ganas, o parece que se va disfrazado de fantasma. A
breviando, pasamos la vergüenza de repetir el traje del año pasado Edurne y yo, aunque se nos apuntaron Paulatxa y Alvarito (aunque éste se escaqueó en un momento determinado debido a su intensa vida social). Diego y Patroclo se vistieron otra vez de camuflaje. Y oye, nos lo pasamos tan bien como siempre o mejor.

Luca y Artemis se reencuentran. Como se puede apreciar, no hay ningún rencor de por medio, lo que deja bien claro que Artemis no hizo ninguna maldad por voluntad propia (yo no sé nada... escuché no sé qué de "imperius"... ya se sabe).

Espectacular fue cuando encontramos en el Atxiki a unos sujetos que iban de Gryffindor (considerando que, de cuatro que íbamos, nadie éramos de semejante antro escolar... les lanzamos unos cuantos "crucios" nada más verlos), más majos que las pesetas. La única pena fue no haber cargado la cámara de fotos antes de salir, porque se me gastó la batería y no pude hacer muchas fotos, aunque ahí queda constancia de nuestras pintacas y de lo bien que salió la noche.
¡¡¡Crucioooooo!!! (ya es mala pata que sacáramos la foto justo cuando Edurne estaba fuera)

Por lo demás... feliz año a todos.
Celebradlo con... uhmmm un poco de vodka de grosellas con limón. Lo probé el otro día y ¡no tiene nombre!. Acompáñese con buena música... el vídeo de homenaje a Dio que han hecho entre buena parte del personal de muchos grupos metaleros navarros y que estuvimos escuchando todo el finde. Una gozada.